Jaén, 5 de noviembre de 2014.- La junta directiva de la Confederación de Empresarios de Jaén (CEJ) acordó la incorporación de la Cooperativa Farmacéutica de Jaén (JAFARCO) y de Sunair One Energy como nuevos miembros asociados a la organización empresarial. En el último año la CEJ se ha centrado en ampliar su base asociativa lo que se ha concretado en la incorporación de ocho firmas comerciales y cuatro asociaciones empresariales. En este sentido, el presidente de la CEJ, Manuel Alfonso Torres, destacó la importancia de abrir la organización a sectores y empresas «que puedan aportar sus conocimientos y capacidades en los órganos de participación institucional en los que la Confederación participa representando a los empresarios y fomentar la participación interna, en sintonía con el nuevo plan de acción de la CEA».

La Confederación de Empresarios de Jaén también valoró la iniciativa impulsada por la Federación del Metal de crear un clúster industrial en torno al aceite de oliva con el objetivo de generar empleo y actividad industrial vinculada a este sector. Se trata, tal y como se puso de manifiesto en el transcurso de la junta directiva, de un proyecto que demanda la implicación de los agentes sociales y las administraciones. Cooperación es, asimismo, lo que demandaron los empresarios para acabar con la alarmante cifra de parados de la provincia que ayer mismo se conocía. La CEJ alertó de que la mejora en las contrataciones puede verse frustrada con los costes sociales que lo gravan y que está previsto que vuelvan a incrementarse en 2015. Por ello, solicitó la adopción de medidas para proporcionar estabilidad al mercado laboral jienense.

Por último, la Federación de Constructores informó a los miembros de la directiva de la CEJ de la situación en la que se halla el PGOU de la ciudad debido a las suspensiones que afectan a muchos de los sectores urbanísticos y que supone la paralización de su desarrollo hasta que se subsanen las causas que las motivan y se desbloquee. Constructores advirtió de que en el momento actual, crítico para el sector de la construcción, el nuevo PGOU «no puede ser un obstáculo para los empresarios, sino que debe convertirse en una ayuda» y apelaron a la voluntad política para levantar las suspensiones pendientes y ejecutarlo.